Contenidos
- ¿Cuáles son los síntomas del síndrome del ovario poliquístico?
- ¿Es bueno hacer deporte si tienes síndrome de ovario poliquístico?
- ¿Qué alimentos comer si tienes síndrome de ovario poliquístico?
- ¿Cuál es el tratamiento para el síndrome del ovario poliquístico?
- ¿Existen suplementos que ayudan a controlar el síndrome del ovario poliquístico?
- El síndrome del ovario poliquístico se puede manejar con buenos hábitos
El síndrome del ovario poliquístico (SOP) es un trastorno complejo, de tipo endocrino – metabólico caracterizado por irregularidades en el ciclo menstrual, disfunción ovulatoria, producción elevada de hormonas masculinas (hiperandrogenismo) y criterios ecográficos con morfología de ovario poliquístico. Pueden existir hasta 16 fenotipos diferentes con consecuencias metabólicas y reproductivas diversas.
Su prevalencia es entre el 5 – 15% de las mujeres en edad reproductiva y es una de las principales causas de infertilidad en la mujer debida a la anovulación.
La presentación clínica es heterogénea y su origen puede ser genético e influenciado por factores ambientales como el patrón de alimentación, inactividad física y estilo de vida. Debemos tener presente los mecanismos etiológicos y desencadenantes del SOP teniendo en cuenta las características individuales de cada mujer, tratando de forma individualizada en cada caso.
¿Cuáles son los síntomas del síndrome del ovario poliquístico?
La sintomatología puede ser muy diversa y no estar presente en todas las mujeres de forma igualitaria, por lo que se deben tener en cuenta diversos factores. Más aún en las mujeres atletas y deportistas, en las que se no suele ser el perfil clásico del síndrome del ovario poliquístico y en las que se reducen significativamente los síntomas asociados, así como sus consecuencias. Los síntomas más habituales son:
- Oligomenorrea o amenorrea
- Esterilidad o infertilidad
- Acné
- Sobrepeso u obesidad
- Resistencia a la insulina e hiperinsulinemia
- Mayor riesgo de diabetes de tipo 2 y síndrome metabólico
El diagnóstico del SOP debe ser realizado por un profesional médico y puede llegar a ser largo y complicado dada la variabilidad de los síntomas. Tanto el diagnóstico como el tratamiento de forma precoz resultan esenciales dado que el SOP predispone al desarrollo de ciertas patologías a largo plazo.
Factores desencadenantes
La etiología del síndrome del ovario poliquístico es desconocida. Habitualmente el hiperandrogenismo y la resistencia a la insulina (RI) asociada a un aumento de la insulina plasmática son dos de las características etiológicas principales y endocrinas que interactúan entre sí en la aparición y desarrollo de la enfermedad. Además, se da una alteración del eje hipotalámo – hipofisiario con elevación de la hormona luteinizante (LH) respecto a la folículo estimulante (FSH) y un aumento de hormonas androgénicas como la DHEA y androstendiona.
Las mujeres con SOP tienen una prevalencia de exceso de peso (88%), soliendo presentarse en la clínica con dos tipos de pacientes: obesas y no obesas.
Parece ser que la resistencia a la insulina (RI) tiene un papel central en la patogénesis. Está presente en el 75% de las mujeres delgadas y en el 95% de las mujeres con sobrepeso. La RI juntamente con unos niveles de insulina elevados en plasma pueden ser desencadenantes de provocar ciclos menstruales irregulares y afectar a la función reproductiva al aumentar la producción de hormonas androgénicas por parte del ovario y reducir la producción de SHBG (globulina transportadora de hormonas sexuales). La adiposidad visceral amplifica y empeora el hiperandrogenismo así como la RI y a su vez induce la acumulación de tejido adiposo abdominal. Se forman un círculo vicioso y agravando todavía más a la función reproductiva.
Es decir, las interacciones entre los niveles de andrógenos, la resistencia a la insulina y la obesidad afectan al metabolismo endocrino provocando trastornos en la ovulación y en la reproducción.
Secundariamente a un perfil lipídico alterado ligado al sobrepeso u obesidad y diversas anomalías metabólicas las pacientes con síndrome del ovario poliquístico tienen asociado un mayor riesgo cardiovascular y mayor prevalencia de enfermedades cardiovasculares, síndrome metabólico, diabetes tipo 2 y cáncer de endometrio. Por esto, el SOP no sólo afecta a la salud reproductiva, sino que tiene riesgos potenciales a largo plazo.
¿Es bueno hacer deporte si tienes síndrome de ovario poliquístico?
Muchos estudios han demostrado el efecto positivo del ejercicio para el tratamiento de la sintomatología del SOP. Pero las características específicas del ejercicio todavía no están delimitadas. El ejercicio, aunque tiene impacto leve o moderado sobre las hormonas reproductivas, sí tiene impacto sobre la composición corporal y los factores de riesgo.
Especialmente el ejercicio aeróbico mostró mejoras en el VO2máx, en la presión arterial sistólica y diastólica (PAS y PAD) en los individuos con hipertensión y en el perfil de lípidos plasmáticos (triglicéridos, colesterol total y LDL-c). Además el trabajo de fuerza será esencial para mejorar la calidad de la masa muscular y reducir las alteraciones en las glucemias y la incidencia del síndrome metabólico.
¿Qué alimentos comer si tienes síndrome de ovario poliquístico?
Con el fin de mejorar el perfil lipídico, la RI, la intolerancia a la glucosa y mejorar el patrón hormonal, se debe llevar a cabo una alimentación equilibrada, evitando lo máximo posible el consumo de alimentos altos en azúcares y carbohidratos simples y fomentar el consumo de:
- Cereales integrales y tubérculos: Se deben incorporar carbohidratos complejos de bajo índice glucémico, como quinoa, avena, espelta y centeno integral, trigo sarraceno o tubérculos como la patata y boniato (mejor si son cocinados, enfriados y recalentados por el almidón resistente). El aporte adecuado debe ser individualizado según la actividad física de cada persona por parte de un profesional de la nutrición.
- Frutas y verduras: Son ricas en fibra, vitaminas, minerales y compuestos antioxidantes que son esenciales en casi cualquier tipo de alimentación. Por el contenido elevado en fibra, son altamente saciantes y nos ayudarán a la mejora y mantenimiento de la composición corporal a medio y largo plazo. Evita aquellas que vayan en almíbar, en forma de zumos (incluso caseros) y deshidratadas por su elevado contenido en azúcar.
- Legumbres: Son ricas en fibra, muy saciantes y muy recomendables cuando buscamos una pérdida de peso.
- Alimentos proteicos: Prioriza los de origen vegetal, como el tofu, soja, tempeh, seguido de los huevos, pescados y carnes blancas. Su aporte debe ser individualizado en cada caso por un profesional con el fin de garantizar su aporte y mantenimiento según los objetivos.
- Grasas saludables: Están presentes principalmente en algunas semillas, huevo, pescado azul, aguacate, frutos secos y aceite de oliva. Los ácidos grasos omega-3 son fundamentales para mejorar el perfil lipídico, la intolerancia a la glucosa y la sensibilidad a la insulina.
¿Cuál es el tratamiento para el síndrome del ovario poliquístico?
El tratamiento de primera línea para las mujeres con SOP es la modificación del estilo de vida, actividad física y mejora del patrón dietético. El objetivo es reducir la resistencia a la insulina, mejorar el metabolismo y perfil hormonal y la función reproductiva. En mujeres con sobrepeso u obesidad el objetivo debe ser la reducción del peso corporal en un 5 – 10% del peso inicial.
Con la mejora del patrón dietético se puede suplir la deficiencia de nutrientes interesantes como el omega-3, calcio, magnesio, zinc y vitaminas como el ácido fólico, vitamina C, vitamina B12 y vitamina D.
Otros posibles tratamientos son mediante terapia antiandrogénica con anticonceptivos orales y otros fármacos vía oral, como la metformina, entre muchos otros.
¿Existen suplementos que ayudan a controlar el síndrome del ovario poliquístico?
Podemos encontrar varios compuestos o principios activos presentes en la naturaleza y en algunos alimentos que facilitan el control del síndrome del ovario poliquístico. Cabe recordar que para que funcionen tienen que estar incluidos en el contexto de una modificación de los hábitos de vida. Son los siguientes.
Inositol
El inositol participa en la regulación del metabolismo lipídico y RI, demostrando tener un efecto beneficioso en diversos aspectos:
- Reduciendo los niveles séricos de andrógenos (testosterona total y libre, androstendiona y DHEA-S), aumentando los niveles de SHBG (por su efecto sobre la RI) y normalizando la duración del ciclo menstrual.
- Reducen los niveles de glucosa en ayunas
- Además, el myo-inositol podría mejorar la calidad de los ovocitos, con mejores tasas de ovulación y fertilidad.
Ácido fólico
Es clave especialmente en aquellas mujeres que busquen embarazo y durante el mismo, dado que evita el aborto y el desarrollo de patologías en el feto.
Vitamina D
Un estudio reciente mostró que el déficit de vitamina D es común entre las mujeres con SOP, evidenciándose niveles bajos de 25-hidroxivitamina D en plasma (<20ng/dl). Niveles bajos de vitamina D están correlacionados con algunas comorbilidades del SOP, como resistencia a la insulina, alteraciones metabólicas y niveles elevados de testosterona y dehidroepiandrosterona (DHEA-S). La desregulación del metabolismo de la vitamina D puede ser a consecuencia del SOP y no su causa.
Algunos estudios sugieren efectos positivos de su suplementación a dosis bajas (3200Ui), mediante la mejora del metabolismo de la glucosa y resistencia a la insulina, así como la frecuencia del ciclo menstrual y de marcadores bioquímicos relacionados con la función hepática.
Omega 3
Los ácidos grasos omega-3 pueden ser una estratega útil para las pacientes con resistencia a la insulina, al mejorar el índice HOMA y aumentar los niveles de adiponectina, así como para disminuir los niveles de colesterol total, LDL-c y triglicéridos.
Otros compuestos
Se han estudiado otros posibles suplementos y hierbas medicinales para el tratamiento de la sintomatología del SOP, como:
- Menta verde (Mentha spicata L.), con efecto antiandrogénico y mejorando el desarrollo del folículo en el ovario
- Regaliz suave (Glycyrrhiza glabra), con actividad antiandrogénica, reduciendo el exceso de testosterona al bloquear la conversión de androstendiona.
- Vitex agnus-castus, al ser un buen regulador del ciclo menstrual
El síndrome del ovario poliquístico se puede manejar con buenos hábitos
En resumen, en el manejo del SOP resultará esencial la sinergia entre la dieta y ejercicio físico. Se pueden utilizar algunos suplementos como los anteriormente nombrados. Los compuestos fitoquímicos y las hierbas medicinales pueden ofrecer muchas posibilidades de intervenciones para apoyar el tratamiento del SOP en diferentes fases de la enfermedad, debiéndose individualizar en función de la sintomatología presente en ese momento. Aunque a día de hoy, la evidencia de estos compuestos todavía es baja por lo que se requieren más estudios a posterior.
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