El espino amarillo o Hippophae rhamnoides L., es un arbusto originario de las regiones templadas y frías de Eurasia, como el Himalaya indio, China, Rusia y países de América del Norte y Europa.
Sus bayas se han utilizado durante siglos en la medicina tradicional por la presencia de sus múltiples componentes bioactivos. De hecho, contiene casi 200 compuestos bioactivos diferentes. Sus beneficios medicinales se deben a que son ricas en vitaminas, tocoferoles, ácidos grasos insaturados, compuestos fenólicos y carotenoides.
En estudios realizados in vitro e in vivo, las hojas y las bayas del espino amarillo han demostrado actividad antioxidante, antiinflamatoria, hepatoprotectora, antiviral y antimicrobiana gracias a los compuestos previamente nombrados.
Compuestos bioactivos presentes en el espino amarillo
- Elevado contenido en vitamina C (275 mg). Las bayas pueden contener mayores cantidades de esta vitamina que otras frutas, como los cítricos o el mango.
- Los polifenoles, que incluyen principalmente ácidos fenólicos y flavonoides, son los principales compuestos con acción antioxidante presente en el espino amarillo. Éstos ejercen funciones importantes en la prevención de ciertas patologías, como las patologías cardiovasculares o el cáncer.
- El contenido en carotenos le proporcionan el color anaranjado-amarillo característico del fruto. Los carotenoides tienen funciones antioxidantes y son precursores de la vitamina A.
- Es rico en ácidos grasos que participan en ciertos trastornos de la piel, la mejora de las mucosas y las enfermedades cardiovasculares. Los principales ácidos grasos presentes son el palmítico, palmitoleico, oleico, linoleico y alfa-linolénico.
- El contenido en fitoesteroles puede tener un papel importante en la prevención de patología cardiovascular, al reducir los niveles de colesterol LDL y tener acción antihiperlipidémica. Un metaanálisis demostró que la suplementación con espino amarillo mejoró las cifras de colesterol total, triglicéridos, LDL-c y HDL-c en sujetos con hiperlipidemia, pero no en sujetos sanos.
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Propiedades del espino amarillo
- Efectos sobre el sistema digestivo
El epitelio del sistema gastrointestinal forma una barrera protectora que nos protege frente a patógenos a la par que está expuesta a los agentes tóxicos que provienen de la alimentación. La disfunción de la barrera intestinal nos puede llegar a ocasionar ciertas patologías, no sólo a nivel intestinal, si no a nivel inmunitario.
En estudios animales, un polisacárido presente en las bayas de espino amarillo ha demostrado protección intestinal con efectos antioxidantes, reduciendo el estrés oxidativo de la mucosa.
- Acción antitumoral
Estudios in vitro e in vivo han demostrado que una mayor ingesta de compuestos fenólicos, como flavonoides y proantocianidinas, se han relacionado con un menor riesgo de cáncer, al disminuir la proliferación de células cancerosas y causar la apoptosis o muerte celular. Los flavonoides “luchan” contra el estrés oxidativo, que puede causar cáncer y otras alteraciones genéticas a nivel celular. Es especial las proantocianidinas, causan apoptosis de forma dependiente de la dosis además de restringir la proliferación de células cancerosas.
Las proantocianidinas, la curcumina y el resveratrol han demostrado ser efectivos frente al cáncer y coadyuvantes en la radioterapia como tratamiento del mismo. Diversos estudios han nombrado el efecto de ciertos carotenoides en la reducción del riesgo de ciertos tipos de cáncer, aunque todavía faltan más estudios sobre la actividad anticancerígena del espino amarillo.
Espino amarillo en la reproducción y en la menopausia
El espino amarillo se está estudiando como un posible alimento funcional para el tratamiento de diversas patologías reproductivas femeninas.
Tradicionalmente el espino amarillo se ha utilizado para el tratamiento de afecciones ginecológicas como la inflamación uterina y la endometriosis al reducir la sintomatología. Los efectos beneficiosos pueden deberse al contenido en carotenos, esteroles e hipericina.
En modelos animales, puede ser de gran utilidad sobre la endometriosis, al reducir los niveles de citocinas pro-inflamatorias.
Las mujeres en tratamiento de fertilidad también pueden beneficiarse del espino amarillo gracias a su elevada concentración de vitaminas antioxidantes C y E, que aumentan el grosor endometrial y el flujo sanguíneo del endometrio, pudiendo aumentar la tasa de fertilidad. Otros componentes pueden regular la función ovárica, la reproducción y la fertilidad al afectar a la producción de estrógenos y otras hormonas ováricas.
También ha demostrado beneficios para la sintomatología propia de la menopausia, como la atrofia vaginal, el adelgazamiento y la sequedad de la mucosa. Con la llegada de la menopausia, hay una disminución de los estrógenos que provoca cambios no sólo en la masa grasa, aumentando la masa grasa visceral, si no afectando a la densidad de la masa ósea, masa muscular y sobre las mucosas, provocando sequedad y atrofia vulvovaginal, pudiendo afectar a las relaciones sexuales.
Los estrógenos se relacionan con el envejecimiento de la piel al causar un adelgazamiento de la dermis, afectando a la síntesis de colágeno y elastina debido a un aumento del estrés oxidativo y a la pérdida de vascularización.
Para la mejora de la atrofia vaginal, el aceite de espino amarillo puede ser de gran utilidad por su contenido en ácidos grasos y sustancias antioxidantes, regenerando y protegiendo las mucosas. Otras sustancias como los fitoestrógenos vegetales, la vitamina D y el hipérico pueden ser útiles para la prevención de la atrofia vaginal. Sin embargo, se desconoce si los ingredientes tienen un efecto positivo sobre la vagina y el útero sano.
Una opción viable es tomarlo de forma oral, a razón de 3g en extracto de espino amarillo de forma diaria durante tres meses o aplicarlo a nivel tópico en forma de aceite. De forma tópica aplicada al menos dos veces por semana durante 90 días, se puede utilizar para el tratamiento de la sequedad vaginal, picores y ardor, además de mejorar la función sexual.
Efectos secundarios del espino amarillo
El espino amarillo puede provocar una serie de efectos secundarios en algunos casos aislados. No es algo común, pero entre los más frecuentes destacan:
- Reacciones alérgicas sobre todo en forma de enrojecimiento de la piel o picazón tras el consumo del producto.
- Malestar gastrointestinal que se consolida como molestias estomacales, náuseas o diarrea.
- Presión arterial baja. Actúa como hipotensor, por lo que puede afectar a aquellas personas que tienen tendencia genética a mantener una presión sanguínea reducida.
- Existen reportes conforme ha llegado a interferir sobre la coagulación sanguínea, por este motivo hay que evitar su uso si se está bajo tratamiento con fármacos anticoagulantes.
¿Cómo conseguir el espino amarillo?
Actualmente, se está comenzando a utilizar como aditivo en alimentos por su elevado valor nutricional. Se comercializa como aceite, en polvo liofilizado, en zumos de frutas, bebidas, yogures y mermelada. Aunque a día de hoy no existen muchos alimentos ricos en este compuesto, tiene un gran potencial para su aplicación en la industria alimentaria.
Aunque el espino amarillo parece ser útil para diversas patologías por su gran variedad en compuestos bioactivos, como vitaminas, carotenos, polifenoles, fitoesteroles y ácidos grasos, se debe tener en cuenta que el contenido y la composición de los compuestos antioxidantes dependerán de factores geográficos y las condiciones climáticas de crecimiento de la planta así como la variedad de la misma.
A día de hoy la evidencia es limitada, por lo que se requieren más estudios y a mayor escala que permitan aislar e identificar los compuestos bioactivos específicos para la prevención y tratamiento de enfermedades y establecer las dosis de tratamiento, así como los múltiples usos en la industria alimentaria.
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